Qué es un desfibrilador y para qué se utiliza
Para ello dispone de unos sensores que se colocan: debajo de la clavícula derecha y en la línea media axilar izquierda, a unos 10 cm de la axila.
Estos sensores analizan el ritmo cardiaco e indican al usuario cual es el momento necesario para aplicar la descarga y con que intensidad.
El desfibrilador, gracias a la descarga que realiza, es capaz de restaurar el ritmo cardiaco normal a través de la pared torácica.
En caso de parada cardiaca, es de vital importancia que el tiempo de reacción sea el mínimo posible para que las posibilidades de sobrevivir aumenten, es por eso la importancia de conocimientos de primeros auxilios y la disponibilidad de desfibriladores.
Puntos básicos para poner un desfibrilador en funcionamiento:
Aunque el uso de este dispositivo no es especialmente difícil vamos a señalar los puntos básicos para ponerlo en funcionamiento:
1. Encenderlo.
2. Colocar los electrodos en la clavícula derecha y a unos 10 cm debajo de la axila izquierda. Habitualmente el desfibrilador o los propios electrodos incluyen un dibujo para ayudar en su colocación.
3. El desfibrilador realizará un análisis y decidirá, según la actividad del miocardio, si debe realizar la descarga o no. Mientras tanto, no se debe tocar al paciente para evitar entorpecer el proceso.
4. Seguir los pasos que indique el desfibrilador y las indicaciones de las personas del 112.
Recomendaciones para el uso correcto de un desfibrilador.
Las precauciones que hay que tomar al utilizar el desfibrilador son esenciales y se aconseja romper la ropa y depilar la zona para asegurar el correcto funcionamiento, así como no tocar al paciente mientras analiza el ritmo y cuando se aplica la descarga.
¿Quién puede utilizar un desfibrilador?
Dependiendo de la legislación especifica que haya en cada comunidad autónoma en algunos casos no podrán utilizar el desfibrilador sin tener formación homologada.
En Aragón, DECRETO 30/2019, de 12 de febrero, del Gobierno de Aragón, cualquier persona mayor de 16 años y que tenga los conocimientos básicos en reanimación cardiopulmonar, soporte vital básico y tenga formación homologada podrá hacer uso de un DEA / DESA.
Los responsables de las instalaciones en las que deben colocarse por normativa un desfibrilador, deben asegurarse que habrá personal formado en su utilización con los correspondientes cursos y reciclajes.
Dónde deben encontrarse los desfibriladores.
Aunque en cada comunidad autónoma la legislación es diferente, por norma general estos aparatos tienen que encontrarse instalados en grandes superficies comerciales, estadios deportivos, medios de transporte, locales con gran afluencia y también se recomienda en empresas. En España hay de media unos 3 desfibriladores por 10.000 habitantes.
Puedes leer en esta entrada los lugares en Aragón en los que es obligatorio por normativa que se disponga de un desfibrilador.
Gracias a los desfibriladores la recuperación del ritmo normal se consigue hasta en un 90% de las ocasiones.
También está estudiado que en una parada cardio respiratoria, por cada minuto que transcurre, las posibilidades de recuperación se reducen hasta un 10%.
Por esto cada minuto cuenta. Cada desfibrilador cuenta.
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